martes, 31 de diciembre de 2013

Hasta la vista 2013!!


Fin de año! Me encanta, me encanta mucho!!! Y más desde que como uvas, antes les tenía manía y celebraba las campanadas con mandarinas (siempre era  la última en terminar y me repateaba, no veas lo que cuesta engullir 12 gajos en 12 segundos), u olivas (pueden llegar a darte mucho asco comiéndotelas a esa velocidad, en serio) y Conguitos o Lacasitos de pequeña... En fin, al hacerte mayor se te quitan las tonterías y  te das cuenta de que las uvas son la mejor opción, la edad tiene esas cosas.


Pero para mí lo mejor de fin de año son 2 cosas:

1º. Hacer un repaso del transcurso del año que acaba (apreciar las cosas buenas que me han ocurrido, analizar las no tan buenas, qué es lo positivo que me llevo para el año siguiente…)  y pensar en lo que quiero para el año entrante (este es mi yo profundo).
2º. Preparar la fiesta y decidir qué me pongo (este es mi yo superficial)!!!

Hoy sí que sí, queridas, manga ancha!!! Es el día para vestirse y maquillarse como os salga de la peineta, brillos, purpurinas, excesos y horteradas, si eres una fan reprimida de Jersey Shore y sus outfits, estás de enhorabuena, hoy es tu día! En cualquier caso, hagamos un repaso de las tendencias que han marcado este año y veamos cómo adaptarlas a la noche vieja, os parece? Maquillaje y manos, vamos allá.

En los últimos años, las uñas han sido el nuevo escote, cuidadas cuidadísimas y objeto de análisis, por lo que no podemos olvidarnos de ellas esta noche. El rojo es acierto seguro, y si además le añadimos unos brillos, el efecto no puede ser más festivo. Si os gustan las uñas postizas adelante, pero ojito no se os vaya a atravesar una en el esófago entre uva y uva. La decoración masiva ha marcado el año así que el “nail caviar” y demás añadidos son otra buena alternativa, aunque yo me quedaría con las manicuras francesas más vanguardistas, lo mío es el neoclasicismo ;).





































Morados, burdeos, rojos, vino o fucsia para los labios. Los colores intensos han copado las últimas tendencias, y con tanto donde elegir seguro que encuentras alguno que te gusta, te favorece y te pega con el vestido.

wine colored lips and eyes, love these colors for fall





                  Makeup


Eyeliners y sombras con acabados metálicos han sido básicos en las colecciones y looks de este 2013, qué tal si los combinamos elaborando un eyeliner metalizado? Y, además, para los ojos, extensiones y pestañas postizas, look redondo!!!

        Metallic eyeliner


                 i love the natural lip, the white inner corners and the false lashes




Asa Engström


(Debo confesar que las dos últimas imágenes son mis conjuntos favoritos, tanto en estilismo como en maquillaje, ¿Qué os parecen?)

Espero que alguna de estas ideas os sea útil o por lo menos inspiradora!

Aquí termina el último post del año, pasad una noche divertida y empezad el 2014 como se merece, con muchas risas, buena compañía y un buen maquillaje que dure toda la noche! Feliz 2014!!!

viernes, 20 de diciembre de 2013

Estornudar con los ojos cerrados, SÍ. Maquillarse con la boca abierta, NO.


Todo lo el mundo ha intentado estornudar con los ojos abiertos, va, no lo niegues,  y sobretodo conduciendo! Pero parece ser que si lo lográramos los ojos saldrían disparados a una velocidad de 100 km/hora, así que, afortunadamente, el cuerpo humano es inteligente y no nos permite una auto-mutilación tan aparatosa (es mentira, en realidad se trata de un efecto nervioso reflejo que algunas personas incluso son capaces de controlar, pero inspirarse en la cultura popular es mucho más divertido). Cerrar los ojos para estornudar es una necesidad fisiológica, pero abrir la boca para maquillarnos, y por ello parecer "El grito" de Munch, os aseguro que NO es imprescindible. Una mujer maquillándose puede resultar muy sexy, pero la linea que lo separa de lo grotesco es finísima.

"El Grito" Edvard Munch
Te garantizo que es posible maquillarse cómodamente y sin caras extrañas, además voy a contarte el orden ideal para aplicarte los productos y ahorrar tiempo (vamos a ver, a mí me parece el orden ideal porque es el protocolo que yo sigo ;) tú prueba y ya me contarás). 

Por lo pronto empiezo al revés, es decir, comienzo maquillando los ojos. ¿Por que? Porque no le encuentro el sentido a aplicar una base en todo el rostro que luego tendrás que ir retocando porque se mancha, te caen polvitos oscuros de la sombra, te apoyas para maquillarte, pierde intensidad...

Lo primero que hago es aplicar corrector en el párpado móvil, y luego lo matizo con una sombra clara. Tanto el párpado móvil como el corrector son superficies grasas, por lo tanto, si directamente aplicara una sombra oscura que quiero difuminar, se me quedaría pegada y no habría manera de manejarla con el pincel. Grasa + Polvo  = Adherencia extrema (y este concepto tenlo claro a la hora de maquillarte, porque es fundamental para conseguir determinados resultados, lo iremos viendo). 

Una vez el párpado ha quedado matificado, fácilmente podemos empezar a aplicar sombras e integrarlas unas con otras con el pincel.
Si quieres un maquillaje muy intenso en los ojos, hazte una raya en la línea de las pestañas superiores con un lápiz, como un eyeliner, y difumínalo. Al ser una superficie grasa, cuando apliquemos la sombra encima quedará más pegada, compacta e intensa. 

Para hacerte la raya por dentro del ojo, usa el dedo meñique para desplazar un poco la piel del párpado inferior hacia abajo, y, con la misma mano, sujeta el lápiz con los otros dedos, podrás dibujarte la raya por dentro sin poner cara de mochuelo. Tal vez te parezcan maniobras dignas del Circo del Sol, pero verás que en 2 días le has pillado el truco.

Y el momentazo rímel es mi favorito. Sigue estos pasos:
1- Ponte enfrente del espejo.
2- Levanta la barbilla (tirando la cabeza hacia atrás) mientras sigues mirándote al espejo (no abras la bocaaaa).
3- Levanta las cejas.
¡¡Posición perfecta!! Te sigues viendo en el espejo para poder aplicar la máscara de pestañas y te quedan alejadas del párpado, con lo cual no lo manchará. Y lo mejor, sigues estando mona! 
Al fin y al cabo, abrir la boca para maquillarse se hace inconscientemente porque así se tensa la piel y los ojos se abren, pero ya ves que con este paso a paso no te hace falta.
Ah!! por cierto, para dibujar el eyeliner no hay que tirar del extremo del ojo como si no hubiera un mañana, no se tú, pero yo no voy por la calle tirándome del ojo, con lo cual, el resultado que ves mientras lo dibujas no es el mismo que cuando abres el ojo y estás en posición normal. Así pues, procura marcar la línea manipulando lo mínimo la piel y verás el resultado real mientras lo marcas. Lo de tirar la barbilla hacia arriba mirándote en el espejo también es muy útil para ello, sigues viéndote y las facciones están en una posición normal.

Ojitos maquillados, estupendo, ahora limpia tranquilamente los restos de producto o las manchas que puedan quedar en el rostro antes de proceder al siguiente paso.

Si tienes algún granito cúbrelo con corrector que contenga pigmentos verdes, y ahora sí, fondo de maquillaje. De esto os he hablado ya en otra ocasión, pero no viene mal un repasito. ¿Dónde tenemos la mayoría de imperfecciones? Por lo general en la zona mediofacial (nariz, mentón), pues empieza aplicando base ahí y luego extiéndelo hacia los laterales, pómulos, mejillas... intentando reducir la dosis de producto al llegar a la mandíbula, evitando así el "efecto máscara".

A mi me gusta aplicar ahora el corrector en las ojeras, una vez la base está puesta,  porque si aplicas el color adecuado en la zona que hace falta no va a quedar un pegote y te va a dar más luz a la mirada, después llega el momento del iluminador, sobre nariz, mentón, pómulos... 

Ya puedes aplicar polvos translúcidos o un poco de polvos bronceadores para fijar el maquillaje (recuerda, grasa + polvo, si sobre la base fluida aplicamos polvos, la fijaremos) y luego el colorete.

Para maquillar los labios no hace falta poner boquita de Duquesa de Alba, aplica el pintalabios con los labios en posición normal, usas menos cantidad de producto, se maquillan perfectamente, y el resultado que ves es el definitivo.

Tacháááán! Maquillaje listo! Y puedes hacerlo delante de quien quieras porque desde el minuto uno estás perfecta, con los ojos arreglados enseguida y con una expresión facial que no te desfigura.

Este es el último post hasta de aquí una semana, Navidades, fiestas, mucho trabajo... así que me despido por unos días! Pasadlo bien y aprovechar para comer lo incomible durante el resto del año, Felices Fiestas!

Y recordad que si queréis un regalo personalizado, útil y diferente, con uno de estos cursos podéis dar en el clavo!  









martes, 17 de diciembre de 2013

Pinceles y traumas infantiles

Hoy quiero confesar (me encanta la solemnidad folclórica), que estuve enganchada a Bricomania. Creo que era a finales de los 90, lo programaban las mañanas del fin de semana y me quedaba embobada viendo al vasco en su taller, tan bien cuidado y con sus tropecientas  herramientas  organizadísimas. Un cabecero para la cama, una mesa de camping o la casita para el perro, no se le resistía nada, y parecía tan fácil… Yo pensaba, dame a mi esas herramientas que eso también te lo hago yo! Pero me faltaba la casa con garaje y jardín para montar toda la parafernalia, me faltaba el dinero para comprar motosierras,  lijas y demás chismes y lo más importante, me faltaba la gracia para la carpintería.

Pero cuando me ha tocado, he sido capaz de montar un armario de Ikea, YO sola, si si, y me daban ganas de llamar al vasco (creo que se llamaba Kristian...) y decirle, mira lo que he montado con lo justo y sin tanto follón! (Los traumas infantiles calan más hondo de lo que podemos imaginar). Y mi armario de Ikea me parecía más bonito que todas las cosas, y me quedaba estupendamente en casa (y me aguantó hasta que me pasé colgando ropa).

Lo que está claro es que hay que ser realistas y pragmáticos, es importante tener buenas herramientas para obtener un buen resultado en cualquier cosa que hagamos, pero adaptándonos a lo que de verdad necesitamos y le vayamos a sacar partido. Sin duda alguna, unos buenos pinceles van a hacernos mucho más fácil la aplicación de los productos en el rostro, pero, a menos que vayamos a maquillar en Cibeles, no necesitamos invertir en ochocientos pinceles, con unos pocos (buenos) bastará.

Dependiendo de cómo suelas maquillarte te van a hacer más falta unos u otros, pero yo os explico lo justo para un maquillaje básico de diario y para algo más elaborado (asistir a una cena, al teatro...).



Fondo de maquillaje fluido. Hay 2 formatos de pinceles que son los más prácticos. La brocha redonda, se usa mojándola en maquillaje y dando círculos concéntricos con ella suavemente sobre la piel.
Con la otra brocha, plana,  extendemos el producto sobre la el rostro, como si se tratara de un lienzo, insistiendo en los rinconcitos, como las aletas de la nariz, y vigilando en los bordes, de las cejas por ejemplo, para que no queden pegotes de producto. Mi favorita es la redonda porque el resultado es mucho más natural, pero eso es cosa vuestra.

                                                                     
Brocha plana
         
Brocha redonda



















Brocha colorete. Hay mil formatos para esta brocha, pero no hace falta complicarse mucho. Las oblicuas están bien para marcar pómulo, y las redondeadas para dar rubor, extender los polvos bronceadores o los polvos de maquillaje compactos .

Brocha oblicua
Brocha redonda



















Pinceles para sombras. Aquí entramos en un surtido infinito de opciones, un quebradero de cabeza, vaya. Hay quien se vuelve loca con los zapatos, a mi me pasa con los pinceles, los tengo todos, pero como decía antes, vamos a ser prácticas. Lo esencial, os aconsejaría al menos un par: uno ancho plano para depositar las sombras en el párpado y otro redondeado para difuminarlas. Si además le añadimos un tercero, podemos tener uno dirigido a colores claros, otro para colores oscuros y el difuminador.

Pincel para difuminar 

Pincel plano






Perfilador. Los pinceles biselados son ideales para delinear el ojo y darle fuerza, o para rellenar un poco las cejas y perfilarlas. Hay varios tamaños y tipos de pelo, los de pelo natural son los mejores. Yo no sería nadie sin este pincel, simplemente aplicando un poco de sombra oscura con él en la línea de las pestañas, logramos reforzar la mirada, aportándole al ojo un gran cambio. Y si quieres un eyeliner grueso, también puedes usarlo.




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Pincel biselado


Eyeliner. Si sois asiduas al eyeliner, os recomiendo encarecidamente que os hagáis con un pincel para ello. Los aplicadores que vienen con el producto suelen ser poco precisos (además, si quieres que el eyeliner te dure todo el día necesitarás uno en crema, vienen en tarro, así que necesitarás pincel sí o sí). Dependiendo del resultado que busques necesitarás uno más fino o más grueso, en las fotografías te muestro un par de ejemplos. Yo uso el recto para mí, y el anguloso es más cómodo para maquillar a otras personas, aunque tal vez a ti te guste más.

ref.260ref.250 


Pincel cejas-pestañas. Para peinar las cejas y pulir las pestañas, nada mejor que un pincel en espiral. Ayuda a retirar los excesos de máscara de pestañas, y además nos es muy útil a la hora de depilar las cejas para ver que pelillos sobran y podemos cortar, y para aplicar un poco de espuma y fijarlas si son cejas rebeldes (aunque el rimel transparente es la mejor opción para ello).
spooly brush eyebrows
Pincel en espiral

Estos serían los fundamentales, a mi parecer. Puedes añadir un pincel para labios, por ejemplo, o para aplicar el corrector, aunque ya los consideraría más secundarios. Normalmente no vas a llevarte el pincel de labios para retocarte... y los correctores si queremos un resultado natural es mejor aplicarlo con los dedos.

Un par de detalles antes de acabar: 
- Fíjate a la hora de elegir pinceles porque existen 2 tipos distintos, los hay de pelo sintético (poco porosos y más baratos, adecuados para productos oleosos y fluidos) y pinceles de pelo natural (más porosos, más caros y adecuados para aplicar productos en polvo).
- Para limpiar tus pinceles utiliza agua tibia y jabón neutro. Desliza el pincel suavemente por la palma de tu mano con el jabón (el típico de manos sirve) y verás como suelta el producto acumulado (no espachurres los pelitos o te durarán cuatro días!) y luego sécalos en horizontal, nunca en vertical porque si le entra el agua al mango se te pudrirán.

Si necesitáis actualizar vuestros pinceles aprovechar para pedírselo a los Reyes Magos o al yankee de la barba, que en nada lo tenemos por aquí!

Feliz semana!

viernes, 13 de diciembre de 2013

"Fondo de tocador"


Cuando estudiaba estilismo dimos una clase entera en la que nos hablaban del “fondo de armario”. Nos nombraron un listado entero de las prendas que debían formarlo, camisa blanca, zapatos de salón con tacón medio, americana negra o azul marino…bla, bla, bla… no sé a vosotras, pero a mí me suena aburridísimo.

Yo tengo fondo de armario, sí, pero lo forman prendas con las que me siento cómoda, considero que me favorecen y son versátiles. Tal vez tengo una americana rosa en lugar de negra pero, oye, la cuestión es que va conmigo, me queda bien y es de buena calidad, porque no nos engañemos, un artículo de calidad es una inversión, siempre da más el pego y nos va a durar más tiempo en buenas condiciones.

Y qué pasa con el pobre neceser? Maquillajes que parecen mayonesa cortada, pinceles despeluchados, una cantidad ingente de sombras y barras de labios que solo te das cuenta de que tienes cuando se te rompen y lo dejan todo perdido...  Un poquito de organización, por favor. 

Es importante tener un buen “fondo de tocador” y contar con una serie de productos que sepas que te quedan a la perfección, encajan con tu día a día y sabes exactamente cómo usar para sacarles partido. Además te ahorran tiempo a la hora de pensar en cómo maquillarte (ahorran tiempo y sitio, porque cuando tires lo que no usas verás que rápido encuentras lo que sí necesitas) .

Os explico cómo sería un "fondo de tocador" básico basiquísimo, con lo que considero imprescindible para un maquillaje diario, a partir de ahí, vosotras mismas añadid o quitad cosas, es tan personal como el fondo de armario.

Base de maquillaje: para que la piel quede lisita y uniforme necesitamos una base de maquillaje con un color lo más parecido posible al nuestro y con una textura que sepamos aplicar acorde a nuestro tipo de piel. Hay bases fluidas naturales, muy cubrientes, oil-free para pieles grasas, en polvo, en crema… en fin, una barbaridad de formatos, lo cual permite encontrar una solución perfecta para ti. Si queréis ya hablaremos otro día de tipos de bases para que os sea más fácil decidir, en este post os explicaba un poco más sobre sus funciones y métodos de aplicación. Por cierto, aprovecho para contaros que si estáis pensando en compraros una BB cream (muy de moda) os lo podéis ahorrar. Solo tenéis que mezclar una pizca de vuestro maquillaje (fluido o en crema) con una gota de la crema hidratante que usáis habitualmente... et voilà! BB Cream al canto, no tiene más.

Bases fluidas


Polvos bronceadores: son unos polvos compactos con tonalidades tostadas que sirven para dar un “tonito playa” a la piel. Los hay mates o satinados, personalmente los satinados me parecen muy poco naturales (nadie brilla por naturaleza, a menos que seas un hada o vengas de Saturno), aunque encontrar un bronceador mate cuesta lo suyo. Ideal aplicarlos sobre el rostro con una brocha gorda, matifican el rostro de manera sutil y además sirven para definir pómulo.




Sombras de ojos: para un maquillaje casual de diario hacen falta por lo menos 2 sombras. Necesitarás una sombra nude o beige, (un tono claro vaya, aunque el blanco es demasiado artificial), que te servirá para matificar y unificar el párpado móvil. Y luego una sombra de tono medio u oscuro (marrón, gris, azul, negro...en función de tu estilo) con la que darás vida al ojo, para delinearlo y darle fuerza (en cuanto a brillos...corre a tu cuenta y riesgo...jejeje, es broma, no pasa nada por llevar tonos satinados o nacarados, pero como siempre, pagan justos por pecadores porque hay quien no tiene medida y parece que lleve un cartel de Las Vegas en la cara).

Máscara de pestañas: es sagrada, es la clave de todo maquillaje, es el toque mágico, es la guinda!! a dar volumen! a separarlas! a curvarlas! Esfuérzate todo lo que haga falta en dejar las pestañas como se lo merecen, aquí os cuento todo lo que necesitáis saber sobre ella.

Labial: un gloss, un tono natural o algo más potente si no defines mucho los ojos... A mi me gusta usar un bálsamo hidratante, sin más, ya que suelo darle más importancia a los ojos (llevo siempre eyeliner, de hecho casi nací con él ;)). Llevar los labios bien hidratados es fundamental, vital, diría yo (ayuda a prevenir las arrugas del contorno de los labios, el temido efecto "código de barras").




No os quiero aturullar con demasiadas cosas, pero poco a poco iremos viendo más. Yo, como os decía, uso a diario eyeliner además de todo lo anterior, y corrector o colorete me los pongo dependiendo del día. Adaptar el listado a vuestras necesidades, dependiendo del tiempo que tengáis, la maña con la que os manejéis o a qué os dediquéis (obviamente no es lo mismo trabajar en un hospital, en una joyería o ir a clase...).

A mi suelen decirme: "Anda, vas maquillada? No lo parece, que natural!" pero cuando no voy maquillada los comentarios pasan a un: "Ui! Haces mala cara, te encuentras bien?" Si, si, tal cual! A lo que me refiero, es que, el maquillaje nos ayudará principalmente a vernos "saludablemente guapas" y luego, además, definirán nuestro estilo y nos servirá para adaptaremos a cada situación.


Y si te sientes más perdida que un pulpo en un garaje cuando entras en una perfumería, infórmate del servicio de beauty shopper, con el que ahorrarás tiempo y dinero gracias a la asesoría personal que recibirás en tu casa.

martes, 10 de diciembre de 2013

Las cejas, grandes damnificadas


A diario, a diario se observa el desastre. En el metro, en la tele, en la calle…más a menudo de lo que me gustaría, encuentro cejas castigadas, maltratadas  o abandonadas. 

Os prometo que más de una vez me han dado ganas de parar a alguien para hacerle una foto a las cejas y poder ilustrar mejor mis explicaciones, pero me jugaba que me pegaran una torta, bien merecida. 
Cejas en forma de coma, de sorpresa permanente, semicírculos que parecen ser perfilados con compás… y es que, dar con la forma de cejas adecuada no es fácil, o sí?

Además de proteger a nuestros ojos del sudor, enmarcan la mirada y nos dan expresión al rostro. Os voy a poner un ejemplo extremo para que entendáis a lo que me refiero, fijaros en las cejas de los villanos de Disney y en las de las princesitas.
 



Úrsula y compañía tienen cejas picudas, muy estrechas y larguísimas. En cambio a Blancanieves, Ariel y demás se las dibujan más curvaditas y no tienen ángulos pronunciados… Son dibujos, lo seee, pero veis la importancia de la personalidad que pueden dar o quitarnos unas cejas?  Al mismo tiempo, una persona sin ellas carece de expresión totalmente.


Dicho esto, queda claro la importancia de estos elementos en la armonía del rostro, así pues, vamos al lío. 

Existe un esquema de “la ceja perfecta”, sí, existe y es una pauta fundamental a seguir. Habrá que adaptar el diseño siempre al rostro dependiendo de la forma de óvalo que tengamos, forma de los ojos, si tenemos las cejas muy pobladas o con poco pelo, nariz ancha… pero es el mejor patrón general que tendremos en cuenta.

Para conseguir  las cejas ideales necesitaremos unas pinzas que nos sean cómodas de usar (no es fácil encontrar unas, yo las uso planas y oblicuas como las de la fotografía) y un pincel de cejas (en espiral es mi favorito, además te sirve también para peinar las pestañas). 







Cuando tengas todos esos elementos, hazte con un palito de naranjo o lápiz o cualquier elemento recto y fino con el que vas a trazar las siguientes líneas imaginarias:



A-B. Nos indica dónde debe comenzar la ceja. Tomaremos como referencia el inicio del lagrimal y desde ahí con el palito de naranjo en vertical veremos que pelillos deberíamos eliminar o dejar crecer en el entrecejo.
C-D. Desde la aleta de la nariz hasta el extremo exterior del ojo trazaremos una línea que nos indicará donde debe terminar al ceja.
E-F. Para encontrar el punto más alto de la ceja miraremos recto hacia el frente, y justo donde termina el iris es donde ubicaremos el puente.
G-H. Esta línea deja ver si la tendencia de la ceja es ascendente, descendente o recta.
J. El diámetro de tu iris es el espacio aproximado que debería quedar entre el ojo y la ceja.


Y un par de detalles importantes:

1º Jamás utilices cera para depilarte las cejas. Puedes destrozar la forma como se te vaya un poco la mano o te despistes, y puede caerte en el ojo, en las pestañas… no hace falta que te diga más, si te imaginas las consecuencias se te quitan las ganas de intentarlo. Además, la piel del arco subciliar (justo debajo de la ceja) es finísima, con lo que si la agredimos con tirones acabará descolgándose con el tiempo. En el entrecejo se acepta, pero ves con muchísimo cuidado porque si te pasas arrancando pelo en esa zona parecerá que tienes los ojos más separados que un chihuahua.

2º Jamás sigas modas. Las cejas son muy personales y dependen absolutamente de la forma de tus facciones. Cuántas mujeres habéis visto con cejas finísimas por que se llevaban en los 70? Ahora les toca pintárselas porque se dan cuenta que no les favorecen, y los resultados de una ceja pintada completamente a lápiz no son siempre favorecedores que digamos...

La moda actual son las cejas gruesas, pero, seamos realistas…tal vez parece que lleves dos mostachos en la frente, a menos que desfiles para Fendi en Milán, con lo que plantéatelo muy mucho a la hora de regirte por estos cánones.

Te animo a que experimentes y le pilles el gustillo a las pinzas sin limitarte solo a pulir los pelillos que sobran. Dales forma y verás el cambio, pero sé cuidadosa y estate atenta, porque un solo pelo puede hacer un gran cambio. Adelante, valiente!

Y si no te atreves, siempre puedes llamarme a mí ;) Ahora que se acerca Navidad, los cursos personalizados a domicilio son un excelente regalo para tu hermana, tu madre, tu amiga... o pídeselo tú a los Reyes Magos! Elije el que más te guste en Cursos y Servicios e informate en: infoandmakeuptoo@gmail.com

martes, 3 de diciembre de 2013

Marilyn se equivocaba

Me encanta Marilyn, icono de estilo donde los haya, pero  discrepo con ella en un par de cosas:  Chanel nº 5 me parece sofocante, y los diamantes de mejores amigos no tienen nada, no hay manera de tener uno cerca, oye!




Para mí, la mejor amiga de una mujer es y será siempre la máscara de pestañas. Ojerosa, de resaca o acatarrada, una buena máscara de pestañas (a veces hay que decantarse por la waterproof) siempre va a estar ahí haciendo todo lo posible por mejorar nuestro aspecto.  

Marilyn decía: "De a una chica los zapatos adecuados, y puede conquistar el mundo", lo cual, acato, y añado que si además lo culminamos con máscara de pestañas, el éxito está asegurado . Y en realidad no hace falta llevarlas que parezcan abanicos, con densificarlas y curvarlas un poco será suficiente, aunque eso ya va a gusto del consumidor.  Un maquillaje sin máscara pierde toda la fuerza.

En el envase pondrá, Super Black Power o Maximum Definition Miracle…(son nombres inventados pero cuelan, a que si?) y en el anuncio aparecerá una modelo con pestañas infinitas peinándole el tupé al chulazo de turno, pero sieeeeempre usan pestañas postizas, entre otros trucos, así que ojito con los anuncios a la hora de elegir.





Dicho esto, te voy a dar 2 pautas llegado el momento de escoger máscara, tan solo 2, y van en función de la forma del pincel con el que se aplican:

- Los de silicona y pelos cortitos o separados aportan un resultado sutil a las pestañas, las separan, definen y alargan, son los más adecuados si queremos algo discreto.

- Si queremos volumen lo ideal son los pinceles gorditos con pelos muy juntos, depositaran más producto y ganaremos densidad. Cuanto más gordo sea el pincel, más volumen obtendremos.

Punto y final, es todo lo que debes saber para elegir, no te líes.

Luego el color es fundamental, por supuesto. Soy fan del negro, pero el marrón es una alternativa interesante para cambiar un poco. En cuanto a azules, verdes, purpurinas… me parecen poco favorecedores y demodé, pero esto ya es subjetivo. 

De lo que sigue ahora toma nota para toda la vida, regla básica y fundamental para aplicar la máscara de pestañas: 
-Se aplica con movimientos en zig-zag, insistiendo en la raíz y subiendo hasta las puntas, es LA clave. Nada de tirar de las pestañas con la brochita hacia arriba, que te veo, así te quedarán tiesas, disparadas, apelotonadas, y parecerá que tienes 4 pegotes de pintura en vez de muchas pestañas separaditas y definidas. Luego podemos dar ligeros toques en las puntas para depositar un poco más de producto, alargarlas y remarcar la curvatura.

Lo de poner máscara en las pestañas de abajo no es especialmente de mi agrado, los ojos adquieren un aspecto redondo muñeca pepona no demasiado elegante, además de que es más fácil que se corra y pasemos a parecer la novia del muñeco Chucky... en todo caso, puedes peinarlas con un cepillo en espiral que previamente habrá recogido restos de las pestañas superiores.

Hay  quien también maquilla la parte posterior de las pestañas, es decir,  las pestañas que dan al párpado móvil, para que nos entendamos, supuestamente para curvarlas más. Bajo mi experiencia, aplicar producto en esa zona da más peso al pelo, lo que provoca que se descuelguen y el ojo parezca más pequeño y hundido.

Y para acabar, mientras te maquilles las pestañas tapa con un dedito la boca del bote de máscara, evitarás que se seque y te durará mucho más. LARGA VIDA AL RIMEL (y a los diamantes también ;))! 

Este puente voy a estar incomunicada y sin internet, así que el viernes no habrá post. Nos vemos el próximo martes!

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viernes, 29 de noviembre de 2013

Cómo disimular las ojeras sin parecer David Meca


El efecto David Meca lo habéis visto y/o vivido más de una, no me digáis que no ;)

Consiste en ese preciso momento en el que revisas las fotos de la fiesta del día anterior y ves a tu amiga con un pegote blanco debajo de los ojos, o cuando una señora entra en el restaurante y lo primero que le miras son las ojeras, aparentemente ocultas, pero te llaman la atención por tener un color indescriptible.

Y es que en cuestiones de maquillaje hay dos conceptos que debemos tener claros y saber diferenciar: corrector e iluminador.




¿Qué diferencias hay entre un iluminador y un corrector? TODAS! Aparte de los nombres (bastante explícitos), el iluminador sirve para remarcar,  llamar la atención, definir y reflejar la luz sobre cierto punto, lo que vendría a ser para iluminar precisamente. La textura suele ser fluida y ligera, aparece bastante transparente una vez extendida sobre la piel y contiene partículas que reflejan la luz. El formato habitual es en forma de lápiz acabado en pincel, con un cartucho interior que contiene el cosmético. La firma pionera y creadora de este concepto es Yves Saint Laurent, y su Touche Eclat (alrededor de 29 euros) es el más conocido en el campo de los iluminadores, aunque la mayoría de marcas de maquillaje tienen sus propios iluminadores, con lo que puedes hacerte con uno por precios más económicos.




¿Y el corrector? Este sí, lo usaremos para disimular ojeras, cubrir imperfecciones, neutralizar coloraciones, corregir, vaya!  Suelen ser texturas más densas, cremosas, en stick o en pastilla, que contienen más pigmento y son más cubrientes. 

Por eso cuando veo a gente o fotografías en las que las ojeras lucen resplandecientes me entran ganas de hacerme el Harakiri. Aplicar luz a la zona que queremos disimular????? moooooc!!!!!errooooooorr!!!

El iluminador se usará en las zonas del rostro que queremos destacar, dar volumen o potenciar:
- En el arco subciliar es muy favorecedor (zona justo debajo de la ceja), remarca e ilumina la mirada (sin evocar a dicho nadador).
- Sobre pómulos y en el lateral de la nariz dará volumen, y al aplicar un polvo oscuro en el hueco del hueso del pómulo parecerá que lo tenemos mucho más elevado y marcado, no tendréis nada que envidiarle a Jennifer López.
- Si rodeamos los labios con iluminador, sobre todo en el tercio del medio (el segmento bajo la nariz o arco de cupido) daremos volumen y crearemos un efecto de labios más grandes y carnosos.
- Un toque de iluminador en el tabique de la nariz (si la tienes grande, evítalo) y en el mentón definen el rostro y le dan mucha vida.


Como veis, poco tiene que ver con cubrir las ojeras. Para ello depositaremos un poco de corrector con los dedos o un pincel sintético sobre la ojera y daremos ligeros toques, nada de arrastrar! Y el consejo que os voy a dar ahora es para mi uno de los pasos clave: también podemos poner corrector en el párpado móvil superior, mírate en el espejo y verás que esa zona suele tener otro color. Si le ponemos corrector y luego lo fijamos con alguna sombra clara o natural nuestra mirada quedará más limpia, luego las sombras durarán más y el color será más potente. 

Ya me contareis que tal han ido los cambios ;)

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martes, 26 de noviembre de 2013

Desmontando mitos (II)

No se si recordáis que en el post anterior comenté un par de temas un poco peliagudos, sin ánimo de ofender a nadie. Hoy sigo con mi fijación por acabar con algunas costumbres desafortunadas a mi parecer. 

Vamos a ver, la línea negra en el ojo, a secas, así directamente, sólo con un poco de máscara de pestañas y punto, puede favorecer a un 5% de la población (tirando para largo). Hazte la raya en el ojo y ves a mirarte en el espejo, aquí te espero.

¿Estás? Vale ¿Qué te parece? ¿Crees que es lo mejor que puedes hacer para potenciar tu mirada? No pregunto si te ves diferente, si no más guapa. Sea cual sea tu respuesta, te aseguro que puedes sacar más partido a tus ojos. La raya sola corta el ojo de una forma antinatural, hundiéndolo y empequeñeciéndolo. De hecho, un truco para hacer el ojo más grande y darle más vida es maquillar la linea interior en beige (nada de blanco porque se te verá el globo ocular más amarillo!)

es adecuado hacerla cuando llevamos un maquillaje muy intenso, como sería un sfumato, o si queremos darle al maquillaje que ya llevemos (pongamos por caso un perfilado en sombras marrones) un toque más sofisticado, entonces dará más profundidad a la mirada (ojos pequeños y hundidos mejor abstenerse en cualquier caso, ya hablaremos de vosotros más adelante). 

Sé que es un recurso rápido y fácil y que proporciona la sensación de ir más arreglada pero, no nos engañemos, a las 3 horas suele estar corrida y parece que salgamos de un after además de crear extrañas legañas en el lagrimal . Os prometo que perfilar el ojo con sombra puede costarte 2 o 3 minutos de tiempo más pero el resultado no se puede comparar, y como todo, es cuestión de práctica. Hazte con un par de sombras marrones o una negra y un pincel cortado al bies, verás que te facilita mucho el trabajo y el resultado es más natural y favorecedor, vamos a ver unos ejemplos:

1. Ojo sin maquillar
2. Línea + máscara (y un poco de corrector!), nada del otro mundo¿no?

3. Perfilado + máscara, esto es otra cosa...
4. Perfilado + máscara + línea, resultado más completo!

Fijaros que en la segunda fotografía las pestañas se ven desamparadas, cuatro hilillos, mientras que en la tercera parecen más tupidas y el ojo se ve más rasgado.


El perfilado está hecho con sombra negra para que veáis mejor la diferencia, pero podéis usar una marrón o gris para conseguir algo más neutro, o verde, o granate y un poquito de negro encima para reforzar... ahora ya depende de vosotras, vuestra imaginación y vuestros gustos. En vez de perfilar todo el ojo por debajo podéis hacerlo sólo la mitad, o sólo arriba... hay muchas opciones y la mayoría se adaptan a cualquier tipo de ojo.

Si os gusta ojear revistas fijaros en los maquillajes de las modelos o cantantes (no toméis a Lady Gaga como referencia) y veréis a lo que me refiero. Puedes pensar "Claro, con la de estilistas y maquilladores que tienen cómo no van a estar estupendas!" y tienes toda la razón, precisamente por eso te cuento como lo hacen ellos ;)


Ya me contareis si os animáis a probarlo y que tal ha ido el cambio! Y lo más importante, PA-CIEN-CIA.

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viernes, 22 de noviembre de 2013

Desmontando mitos (I)

Me voy a estrenar con un post que puede hacer que muchas dejéis de leerme inmediatamente o paséis a odiarme, pero hay un par de asuntos que me afligen desde hace tiempo y que quiero gritar a los cuatro vientos.

No he encontrado una  mejor manera de hacerlo público que  mediante el blog, ahí va (imaginaros que lo digo con lágrimas en los ojos, vamos a darle el dramatismo que merece): ¡¡¡LA BASE DE MAQUILLAJE NO SIRVE PARA PONERSE MORENA Y LA RAYA DENTRO DEL OJO EN LÁPIZ NO FAVORECE!!!! Ale, ya lo he dicho. Gracias a Dios, que alivio!!! Dejadme argumentarlo y luego me maldecís, por favor.


Empecemos por la base o fondo de maquillaje (lo que vendría a ser conocido por "el pote" en los 90). Este producto cosmético se utiliza para dar un tono regular al rostro, unificarlo, disimular imperfecciones...y sí, dar un tono saludable a la piel, pero que no parezca que has metido la cara en un cubo de Nutella!

Es importante encontrar la textura que se funda con tu tipo de piel, que la sientas elástica y fresca, no asfixiada o acartonada, y con un nivel de cobertura que te haga sentir cómoda (eso ya es muy personal y no me voy a meter). Cuando vayas a comprarte un fondo de maquillaje pruébate el tono en el cuello o en la mandíbula y elije aquel que sea medio tono o máximo un tono más oscuro que tu propia piel, porque ésta va a absorber un poco del producto una vez lo apliques, rebajando así su intensidad (no es cuestión de que parezcáis Morticia Adams).

Aplícalo desde el centro del rostro (donde solemos tener más imperfecciones, puntos negros, granitos, poros dilatados...por tanto nos interesa cubrir más) hacia el exterior, difuminándolo cada vez más para evitar el dichoso efecto máscara. Una vez la base está bien extendida, date unos toques con polvos bronceadores y una brocha gruesa en frente, nariz, pómulos y mentón para crear un efecto natural de buena cara.

Existen distintos métodos para aplicar la base. Podemos aplicarla con borla o esponjita, siempre con toquecitos (nada de arrastrar porque entonces nos queda la cara a churretes), es el método clásico. Hace unos años se puso de moda la aplicación de la base con pincel, debo reconocer que al principio era bastante reacia, hasta que encontré el pincel perfecto (más adelante hablaremos de pinceles), y ahora es el sistema que uso y con el que obtengo el resultado natural que tanto me gusta. Y el tercer método más común es utilizar los dedos para aplicar la base, lo que mas me gusta es que no desperdicias nada de producto porque los dedos no lo absorben, y es muy fácil abarcar todos los rinconcitos del rostro con las yemas, consiguiendo así un resultado uniforme incluso en pliegues. Probarlos todos y elegir el que mejor os funcione, y eso si, procurar maquillaros siempre con luz natural, ya que no hay nada mas traidor que las bombillas del baño. Yo tengo un espejo con ventosas que fijo en el cristal del balcón y así consigo salir de casa sabiendo de verdad como se va a ver mi maquillaje en la calle. De noche tenemos un poco mas de margen, pero a la que le pilles el truco no vas a fallar en la dosis de base que tu rostro necesita.

Esponjitas de maquillaje
Esponjitas de maquillaje
Pinceles y brochas para bases de maquillaje

Por hoy lo voy a dejar aquí, y en el próximo post os cuento el por qué creo que la raya del ojo está sobrevalorada.

Nos vemos el próximo martes, buen fin de semana!

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